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martes, 11 de mayo de 2010

La "rara y escasa" culebra de Cogulla y la fiabilidad de las fuentes

Clase: Reptilia
Orden: Squamata
Familia: Colubridae
Género: Macroprotodon
Especie: Macroprotodon brevis (Günther, 1862)


Andújar, abril 2010.

Esta es una foto de la segunda culebra de cogulla que tuve la suerte de ver esta primavera. En total, en lo que va de año 2010, he tenido la buena suerte de ver tres ejemplares vivos y la mala suerte de ver uno más atropellado en la carretera. Cuatro en total en diferentes localidades de las provincias de Málaga, Córdoba y Jaén.

Es un hecho que de siempre en los libros y ahora más que nunca en Internet, se copian y pegan afirmaciones dichas por otros sin comprobar si lo que se afirma es cierto o no. Comprobar si algo que se afirma se corresponde con la realidad cuesta más trabajo y es más cansado que hacer un acto de fe, creerlo, y reproducirlo tal cual. Y si el que hizo la afirmación es una autoridad en la materia, razón de más para no dudar.

Digo esto porque en casi todos los sitios en los que he buscado información sobre esta especie dicen lo mismo, que se trata del ofidio mediterráneo más escaso y raro. Incluso yo lo digo (lo reproduzco) en la anterior entrada (ver "Culebra de Cogulla (Macroprotodon brevis)").

Sin embargo, me da que pensar el hecho de que, exceptuando a la omnipresente y abundantísima culebra viperina (Natrix maura), es la culebra de cogulla la especie de ofidio que más veces he visto este año. Es más, me atrevería a decir que donde está presente es más bien abundante, por lo que tal vez debería decirse que es una especie localizada, en lugar de una especie rara o escasa. Lo de que sea una especie localizada no es de extrañar teniendo en cuenta que sus dos presas principales, las culebrillas ciegas (Blanus cinereus) y los eslizones (Chalcides sp.), lo son.

También se dice una y otra vez, que es una especie fosorial y sublapidícola que raras veces sale al exterior. Entonces, ¿cómo es posible que mueran tantas atropelladas en las carreteras?

Todo esto lo digo como pensamientos en voz alta, fruto de observaciones puntuales en el campo y de impresiones subjetivas, ya que yo no he hecho ningún estudio poblacional de esta culebra ni tengo los medios ni la preparación para hacerlo.

Deberíamos ser más críticos con lo que leemos en los libros, y ya no digamos con lo que leemos en Internet, donde cualquier indocumentado puede escribir lo que le dé la gana. Revisando las estadísticas web, veo que en muchos foros y webs enlazan post de este blog como fuente fiable: "esto es así y así porque lo dicen aquí: http://macroinstantes.blablabla...".

La semana pasada, sin embargo, sucedió algo que me dejó perplejo. Un periodista de un medio impreso extranjero de rango nacional de un país que no voy a citar, se puso en contacto conmigo para entrevistarme en calidad de experto en una familia de dípteros para un artículo científico que estaba escribiendo. Según él, un colega suyo le había remitido a mí como experto en el tema. Ja, no me creo una palabra, más bien imagino que el tipo buscó en Google y contactó con el primero que vio en la página de resultados, y como este blog siempre ha salido bien posicionado, acabó intentando concertar una entrevista con un servidor, en calidad de experto sobre un tema del que no tengo ni puñetera idea.

Así nos va. Esto explica el ínfimo nivel que se ve en los artículos sobre temas científicos que publican los medios de comunicación (con honrosas y escasísimas excepciones).

Si los 'periodistas' de los medios impresos, las radios y las televisiones, se están documentando en Internet, copiando lo que dice la Wikipedia y entrevistando al primer pelagatos que encuentran en Google, no me cabe duda de que es el principio del fin de esta civilización.

2 comentarios:

  1. Ja!, te lo dije, el fin está próximo!
    Te en cuenta que todas las cosas humanas, incluso la ciencia, se basan en percepciones. Si el herpotólogo de turno que busca a esta culebra tiene que desplazarse muchos kilometros para encontrarla, y la ve en puntuales ocasiones, pues interpretará que se trata de una animal raro. Si los daltónicos fueran mayoría, quizas ver los colores correctamente sería una anomalia...

    Cuando pienso en bombílidos, siempre pienso en tí, lo mismo al periodista le paso lo mismo, no?

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  2. Cuánta razón tienes: es más fácil encender el ordenador que buscar en una biblioteca.

    Saludos y enhorabuena por el blog.

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