Clase: Reptilia
Orden: Squamata
Familia: Lacertidae
Género: Timon
Especie: Timon lepidus (Daudin, 1802)
Algo les está pasando a los lagartos. Cada vez se ven menos. De hecho esta primavera casi todos los que he visto eran juveniles. Muy pocos adultos. Vale que los juveniles en dispersión son más ingenuos y se dejan ver más facilmente, pero esto indica que de todos estos juveniles que se ven, muy pocos están llegando a adultos.
El lagarto ocelado sigue estando muy extendido y sigue siendo relativamente común, por lo que no se le presta la debida atención. El problema no es cuántos lagartos quedan, sino la tendencia. Una especie muy escasa que despúes de 50 años sigue siendo muy escasa, no tiene problemas, pues sus poblaciones aunque reducidas son estables. Una especie abundantísima que 50 años después sigue siendo abundante pero cuya población se ha reducido drásticamente tiene un problema grave, pues su tendencia es a hacerse cada vez más escasa, y si las causas que provocan el declive no se eliminan, es cuestión de tiempo que deje de ser común y pase a estar amenazada.
Mucha gente dirá: "yo sigo viendo lagartos por el monte, quedan muchos". El problema, repito, no es cuantos lagartos hay hoy en nuestros montes, sino cuantos había hace 50 años. Si se pregunta a la gente del campo de cierta edad, la respuesta es casi siempre la misma: "ahora se ven muy pocos, antes había a montones".
Así que planteo una pequeña encuesta a los lectores de este blog, ¿habéis notado vosotros tambien que ahora se ven menos lagartos?
Yo veo menos ocelados y verdinegros desde hace bastante tiempo en las Rías Baixas desde el Barbanza hasta Vigo...
ResponderEliminarCreo que bastante menos, de pequeño llegué a coger alguno que otro, incluso cerca de los caminos, ahora es muy raro verlos, aunque he de decir que este año he visto 3 o 4, de pura chiripa y siempre desde el coche.
ResponderEliminarPor cierto , preciosa foto. :)
ResponderEliminarSin duda, es una percepción bastante extendida en muchas zonas de Extremadura. En la comarca de La Serena, donde antes se capturaba para el consumo, los viejos del lugar recuerdan altas densidades y ejemplares de gran tamaño que ya es imposible encontrar.
ResponderEliminarPor Guadalajara y Madrid veía muchos más hace 15 o 20 años. Espero que no continúe así la tendencia.
ResponderEliminarGracias por vuestros comentarios. El verdinegro es más delicado con su hábitat pero el ocelado es un generalista que se mueve bien desde las dunas arenosas costeras hasta los canchales de alta montaña pasando por los cortafuegos de los pinares de repoblación o los muros de piedras de los huertos tradicionales. Esto hace más extraño aún su declive.
ResponderEliminarSe ven mucho menos que antes, hace solo 20-25 años (hablo del pueblo de mi padre, en la provincia de Salamanca) eran abundantes, se veían muchos y grandes, y ahora lo raro es ver alguno y si se ve es algún juvenil.
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ResponderEliminarAntes en mi jardín (urbanización de Murcia-Molina de Segura) vivían muchos ocelados y se veían pasar ejemplares grandes. Había muchas crías. En el porche y en unas vigas de madera en el suelo tomaban el sol y cambiaban de piel. Hace varios años que no los veo. Cuando salgo en bicicleta, casi no los encuentro atropellados, antes era muy habitual encontarlos. Incluso he extrañado en algunas excursiones no verlos u oirlos esconderse precipitadamente. Por cierto, tampoco hay lagartijas, solo salamanquesas.
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