Buscar en macroinstantes

sábado, 15 de noviembre de 2008

Imágenes robadas (II)

Clase: Magnoliopsida
Orden: Fabales
Familia: Fabaceae
Género: Vicia
Especie: Vicia onobrychioides L. (?)


Segunda Parte: La Solución Imposible I

La marca de agua

Una solución que han adoptado algunos fotógrafos que publican su trabajo en la web y no quieren que sus fotos sean robadas, es poner una marca de agua. Se trata de una firma, o logotipo que superponen, con algún grado de transparencia, una o repetidas veces a la imagen que quieren proteger. Muchos la ponen justo en el centro, para evitar que puedan eliminarla recortando la imagen, y otros ponen varias a lo largo y ancho de la foto.

A mí me parece una solución lamentable, porque el objetivo de publicar las fotos en Internet es dar a conocer nuestras fotografías, y ese tipo de marcas de agua destrozan la imagen. Es como si para evitar que nos roben el BMW le rayamos toda la carrocería, rompemos los cristales y le pinchamos las ruedas. Es posible que en ese estado no lo roben, pero creo que esa no era la idea.

Personalmente, no entiendo cómo alguien invierte una mayor o menor y muchas veces considerable cantidad de tiempo buscando un buen motivo, estudiando el encuadre, calculando la exposición correcta, ajustando curvas, contrastes, saturaciones, clonando pequeños detalles y motas de polvo, aplicando mascaras de desenfoque, poniéndole un marco, una firma... y entonces sea capaz de estropear el resultado final superponiendo letras o dibujos.

Pero es que además, no es imposible eliminar estas marcas de agua de las fotografías. Una marca de agua no es otra cosa que una imagen superpuesta a la fotografía con cierto grado de transparencia, sumando al valor de cada píxel de la fotografía el valor del píxel de la imagen superpuesta.

Si la imagen es de color uniforme y la transparencia la misma para toda la marca, eliminar la marca de agua es tan trivial como restar este valor al valor de los píxeles de la foto marcada. Si se usan degradados o marcas 'policromadas' el proceso de eliminarla es más difícil pero no imposible y la fotografía queda aún más estropeada. Incluso en este segundo caso, resulta también muy fácil de hacer si se dispone de la imagen usada para la marca, y ésta se puede obtener si se dispone de varias fotos 'protegidas' con la misma marca.

En conclusión, el método de la marca de agua solo protegería las fotografías a condición de usar marcas complejas con cambios de color y variaciones del grado transparencia, y de usar marcas diferentes para cada foto y de colocarlas en zonas no recortables de la imagen, que casi siempre coinciden con las zonas más interesantes. Mucho trabajo, y seguimos teniendo el principal problema de este método: estropeamos nuestras fotos.

En la próxima entrada de esta serie, que no necesariamente será la próxima entrada en el blog, comentaré otras técnicas usadas en diferentes webs para intentar proteger las fotos publicadas en Internet, técnicas consistentes en 'trucos' de diseño o códigos Javascript, y que tienen en común su inutilidad.

1 comentario: